La necesidad de permanecer siempre conectados hace que se valore mucho la existencia de una conexión a la red disponible en todo momento. Por eso, muchos establecimientos, como bares y cafeterías, ofrecen entre sus servicios la posibilidad de conectarse a una red wifi. Lo mismo ocurre con los hoteles o cualquier tipo de alojamiento.
Para los que no paran de viajar encontrar una red wifi puede ser un verdadero suplicio. En muchos casos una conexión web es indispensable para poder trabajar, pero también se requiere para el ocio o para la comunicación. Podemos encontrar ubicaciones donde no encontremos este tipo de servicio o sea de mala calidad.
¿Qué pueden hacer aquellos usuarios que se desplazan de manera continua y también necesitan tener acceso garantizado a la red? Un wifi portátil, también conocido como mifi, es la solución para este tipo de casos. Básicamente, es como tener un router que se puede llevar a cualquier parte y que proporciona una conexión sin necesidad de cables.
Para ello se requiere de lo que se conoce un punto de acceso móvil que necesita de una tarjeta sim de la compañía que se quiera contratar. Es un dispositivo portátil que no suele ser de gran tamaño. Puede funcionar en cualquier lugar dónde reciba la señal del proveedor de telefonía. Una vez encendido, funciona igual que cualquier router proporcionando conexión a internet a los dispositivos que se conecten.
Los equipos que se usan para conseguir un wifi portátil son muy sencillos de usar. Literalmente sólo hay que pulsar un botón para poder conseguir conexión. De esta manera en cualquier ubicación con cobertura se podrá tener acceso a la red. Será necesario contratar la correspondiente tarifa con la compañía telefónica que pueda proporcionarnos este servicio.
Todos los grandes proveedores ofrecen tarifas para conseguir wifi portátil y en muchas de sus ofertas se proporciona el necesario router para ello. En la gran mayoría se ofrece un paquete de datos a cambio de un determinado precio fijo. Es bastante interesante estar pendientes de los bonos y ofertas que los proveedores suelen realizar en determinadas temporadas.
Ventajas y desventajas del wifi portátil
Las ventajas de contar con un wifi portátil son muy interesantes. Es perfecto si se tiene una segunda vivienda en la que no se quiera instalar fibra o cable. También para los que no tengan residencia fija o los que viajen mucho por trabajo. En los desplazamientos al extranjero es recomendable tener en cuenta las condiciones de roaming.
El funcionamiento es muy sencillo, basta con contar con el router de wifi portátil y la tarjeta sim. Una vez colocada ya estás listo para empezar a navegar. Esto hace especialmente atractivo al wifi portátil ya que no requiere de ninguna configuración especial ni de un técnico para su instalación. Para conectar el ordenador o cualquier dispositivo tan sólo se necesitará detectar la red e introducir la contraseña correspondiente.
Entre los inconvenientes se debe señalar que el router de wifi portátil funciona con una batería que debe ser recargada. Esto puede ser limitante en la movilidad ya que siempre necesitaremos en algún momento un enchufe. Algunos equipos no son autónomos y necesitan estar enchufados al suministro de manera continua. También se requiere tener cobertura móvil para conseguir el servicio de conexión a internet.
Las limitaciones en los paquetes de datos en las tarifas pueden suponer también un problema ya que no es una conexión ilimitada como la que encontramos en el wifi fijo. Si se necesita usar mucho la red es conveniente no escatimar en los datos para que no se produzcan sorpresas desagradables.
Una gran cantidad de tarifas para conseguir wifi portátil
El wifi portátil es un servicio que se suele incluir de manera predeterminada en muchos contratos de las compañías. Sin embargo, no suele ser usado por mucha gente ya que siempre se cuenta con la opción de establecer el propio móvil como punto de acceso portátil. Sin embargo, las tarifas móviles no están diseñadas para este uso y puede provocar un mayor coste para el usuario.
Lo interesante es contratar una tarifa para wifi portátil que ofrezca la velocidad y la cantidad de datos que mejor se adapten a tus necesidades. También habrá que considerar otros aspectos como la existencia de permanencia. En ocasiones, la compañía no proporciona el router de wifi portátil por lo que será necesario conseguir uno que sea libre.