¡Jumilla está que se sale! Desde hace siglos, en este territorio murciano se elaboran vinos, pese a unas condiciones climatológicas a menudo difíciles, pero en las últimas décadas, igual que en otras regiones vinícolas de España, se ha vivido aquí una verdadera revolución. Los vinos de la Denominación de Origen Protegida Jumilla están cosechando un éxito rotundo, dentro y fuera del país, por ser vinos elegantes y de calidad impecable.
A las bodegas pioneras de la Denominación de Origen Protegida Jumilla, creada en 1966, las que abrieron el camino y tiraron del carro se han ido añadiendo una serie de proyectos jóvenes y llenos de entusiasmo que han sabido domar el terroir y darles valor a las variedades autóctonas, como la monastrell.
Antes de abrir la botella es importante recordar que Jumilla es una localidad al norte de la provincia de Murcia. Este pueblo de tradición vinícola da nombre a la DOP Jumilla que también incluye a municipios del extremo sureste de Albacete. Llanura manchega y aires mediterráneos es lo que hace únicos a los vinos de Jumilla. Si le añadimos una relación calidad precio inmejorable sobran las razones para descorchar.
Bodegas Alceño, Alceño 150 Aniversario 2019
Alceño fue la primera bodega comercial de Jumilla, fundada en 1870 por Roque Martínez, un emprendedor con visión de futuro que decidió plantar viñedos en una zona arrasada por la filoxera. Este vino celebra por todo lo alto los 150 años de trayectoria de la bodega: Monovarietal de monastrell, elaborado con uva de las cepas más viejas, potente y goloso al mismo tiempo que muy equilibrado. Complejo, con matices de fruta madura y balsámicos. En boca entra aterciopelado, con taninos definidos pero no agresivos. Resulta muy largo y agradable, además de tener una fantástica relación calidad precio. Con carnes de todo tipo, embutidos y quesos. Precio: 15 €
Parajes del Valle, Terraje 2020
Parajes del Valle es una bodega con una filosofía enfocada a la elaboración de vinos totalmente ecológicos, con la mínima intervención y gran respeto por la tradición. De hecho, Terraje homenajea a los colonos que pagaban la renta con una parte de su cosecha, el terraje. La monastrell de cepas de 30 a 60 años expresa todo su carácter en un vino con estructura y cuerpo compensados por frescura y acidez. Aromáticamente es complejo y refleja el terruño. En nariz fruta negra y roja, plantas silvestres, tomillo y romero. En boca persiste hasta dejar una sensación larga y envolvente. Precio: 18 €
Bodegas Luzón, Alma de Luzón 2019
Alma de Luzón es un vino de alta gama de Bodegas Luzón, una de las más antiguas de la región. Es un vino con carácter, complejo y elegante, elaborado con uvas de las variedades monastrell y syrah. Tiene un color rojo oscuro e intenso, con ribetes violetas y reflejos brillantes. En nariz, todo el ADN de sus variedades, aromas a frutas negras maduras, como la ciruela, la mora y la grosella, así como notas de regaliz, especias, madera fina y un toque ahumado. En boca es potente, corpulento, pero al mismo tiempo fino. En boca es liso y largo, los taninos están bien domados y dejan una sensación agradable. Aguanta con poderío caza, carnes rojas y pastas contundentes. Precio: 35 €
Veal Wine, Vael Tinto 2020
Vael es el dios lobo protector de los bosque de los iberos que hace 3.000 años habitaban Jumilla. La familia Lozano, propietaria de la bodega, ha querido así rendir homenaje a la historia de la región, con un vino al que no le falta personalidad en absoluto. Un coupage de monastrell, syrah y garnacha tintorera perfectamente integrado. Le dan un pasaje ligero por barrica y un año en botella. El resultado es un vino fácil de beber, de cuerpo medio, rojo picota con ribetes violáceos, nariz de frutos negros y ligeros toques balsámicos, sedoso y largo. Perfecto para carnes, pescados azules o quesos curados. Precio: 12.50 €
Bodegas El Nido, Clío 2020
El imperio bodeguero Viñas Familia Gil, de Juan Gil, está entre los principales impulsores de la revolución vivida en la DO Jumilla. Este grupo, que actualmente integra bodegas distribuidas por todo el territorio nacional lleva muchos años subiendo el nivel de los vinos de la región y reivindicando la nobleza de la monastrell mediterránea. Clío es un gran vino, de los que invitan a reflexiones placenteras, con comida o sin ella, en momentos que es capaz de volver especiales. La monastrell, con un pequeño aporte de cabernet sauvignon, le da una nariz intensa, llena de fruta madura y confitada, animada por toques de regaliz y café. En boca es divino, voluptuoso y carnoso, pasa y se queda durante un larguísimo y placentero rato. Precio: 44 €
Bodegas Carchelo, Muri Veteres 2017
El nombre de este vino hace referencia a como se denominaba la variedad monastrell en la antigüedad pero el vino es de los más modernos que se elaboran en Jumilla. Bodegas Carchelo tiene la merecida fama de ser una de las principales impulsoras de la “nueva Jumilla” y aquí tenemos un vino que destaca por elegancia y finura, todo un reto conseguido con la monastrell mediterránea. Es fresco al mismo tiempo que carnoso, su gradación alcohólica está muy bien domada por la acidez y el resultado es un señor vino. En nariz, fruta y especias con unos interesantes toques ahumados, aterciopelado en boca, se abre y cierra con peso pero sin exceso. Perfecto para platos potentes, casquería, carnes gelatinosas, cerdo, conejo, guisos quesos madurados y hasta cocido. Precio: 35 €