¡Ya está aquí esa época del año que huele a abrazos, risas y un toque de magia en el aire! Es el momento de compartir, celebrar y, por supuesto, lanzarse a la emocionante misión de encontrar el regalo perfecto. Mientras algunos recurren a bufandas o gadgets (clásicos, pero previsibles) hay un protagonista que nunca falla: el vino. Elegante, versátil y con ese poder único de transformar cualquier instante en algo memorable. ¿Quién no querría un regalo así?
Además, pensemos en lo que nos espera estas semanas: cenas improvisadas, visitas sorpresa y brindis espontáneos que parecen surgir de la nada. Tener un pequeño «fondo de armario vinícola» te salva de apuros y, seamos sinceros, ¡te hace quedar como un anfitrión estrella! Un par de botellas de cava listas para la acción no solo garantizan ese toque festivo y alegre, sino también la tranquilidad de estar preparado para todo.
En esta selección hemos reunido vinos que no solo son deliciosos, sino que cuentan historias, despiertan emociones y conquistan corazones. Ideales para regalar, mimarte o simplemente disfrutar como se merece. ¡Vamos, que están listos para brillar contigo estas fiestas!
Ramón Bilbao – 100 Meses Hormigón
Un siglo de historias, pasión y viñedos que desafían el tiempo. Para celebrar su centenario, Ramón Bilbao ha creado un vino único, una garnacha fermentada en depósitos de hormigón que encarna lo mejor del terruño de Rioja Oriental. Tradición e innovación se dan la mano en esta obra maestra, demostrando que la bodega sigue mirando al futuro con la misma pasión con la que empezó hace 100 años.
De un color granate brillante, este vino invita a un paseo de los sentidos con aromas frescos y frutales de cereza, frambuesa y mora, acompañados por un toque balsámico que evoca un paseo por el monte: menta, hierbas aromáticas y especias que susurran secretos al olfato. En boca, su frescura y textura sedosa son como un vals en el paladar, culminando en un final elegante que parece no querer despedirse.
¿El maridaje ideal? Carnes blancas jugosas, pescados grasos como el salmón o incluso un surtido de tapas que combine desde queso curado hasta croquetas. Este vino no solo celebra un centenario, también podría ser el compañero perfecto de los pacientes guardadores, para muchos años adelante. PVP: 120 €
Bodegas Arrayán – La Suerte de Arrayán Estuche Doble Especial
Hay vinos que saben a talento y dedicación, y La Suerte de Arrayán es uno de ellos. Bajo la mirada apasionada de su enóloga, Maite Sánchez, Bodegas Arrayán ha logrado convertir los paisajes de Méntrida en una experiencia única embotellada. Este estuche excepcional nos lleva a descubrir dos caras de su terroir, una blanca y una tinta… ¡La combinación perfecta!
Tenemos Albillo Real y Garnacha, cada una con una personalidad propia. El Albillo Real, elaborado con viñas plantadas en 1942 en Almorox, cuando se solía mezclar con las variedades tintas de Toledo, es como un susurro elegante al paladar. Notas de fruta blanca madura, flores delicadas y un toque mineral lo convierten en el acompañante ideal de mariscos frescos o aves suaves que piden algo especial en la copa.
La Garnacha, procedente de las imponentes laderas de la Sierra de Gredos, es puro carácter. Aromas de retama, hierbas balsámicas y frutos rojos vibrantes te envuelven como un abrazo cálido, perfecta para realzar carnes a la brasa o platos mediterráneos llenos de sabor. Este estuche es un obsequio elegante al mismo tiempo que un billete directo al alma de Toledo, donde cada sorbo cuenta una historia de pasión, raíces y amor por la tierra. PVP: 50 €
Astobiza – Astobiza Magnum Blanco
¡Cuánto camino han recorrido en las tierras del Txacoli! En Álava se están elaborando verdaderas perlas escondidas y… ¿Qué mejor manera de decir “¡Vamos a celebrarlo!” que con un magnum de Txakoli?Astobiza presenta un verdadero joyón en gran formato, perfecto para compartir en esos momentos que merecen un brindis especial.
Este tesoro de Euskadi combina tradición y modernidad con un fuerte compromiso por reflejar la esencia del terruño. Producido en una finca boutique de belleza excepcional, este Txakoli tiene un color amarillo pálido con destellos verdosos y despliega aromas de manzana, pera y cítricos, complementados con notas herbáceas que evocan el paisaje atlántico.
En boca, su frescura llena de vida, su susurro de salinidad y su – sorprendentemente- tan equilibrada acidez, lo convierten en un compañero esplendido para pescados, mariscos, sushi o platos ligeros de cocina asiática. Además el formato magnum añade un toque especial, permitiendo una evolución pausada que resalta aún más su complejidad. Ya sea como obsequio memorable o el centro de una celebración, está listo para llenar las copas y, con ellas, las sonrisas. PVP: 23 €
Bodegas Tarón – Patiens
Algunos vinos son como un viaje en el tiempo, y Patiens es justo eso. Desde la Rioja Alta, otro diamante escondido que refleja el alma de Bodegas Tarón, una unión de viticultores de cuatro pequeños pueblos que han transformado generaciones de esfuerzo y pasión en un legado líquido. Lo que comenzó como una cooperativa es hoy una bodega que mima sus viñas viejas, auténticos supervivientes del clima desafiante de los Montes Obarenes.
Elaborado con uvas viura de viñas de entre 50 y 90 años, este vino es una oda a la paciencia y al buen hacer. Representa la paciencia por su tres años en barrica y otros dos en botellas. En realidad, como esos blancos de viura emblemáticos de la Rioja podrá esperar mucho, muchísimo más. Está hecho para resistir décadas. Es por la viura con la que está elaborado, que brilla con un color amarillo pajizo y despliega aromas que seducen: notas de pastelería, especias dulces, fruta blanca madura y un toque herbal que lo hace irresistible.
En boca presume de frescura y acidez, esa ultima, con su chulería amable es la que le mantendrá vivo y coleando durante todo ese tiempo. ¿Pero para que dejarlo en herencia? Es mejor disfrutarlo con amor, acompañando un queso cremoso, un postre ligero o incluso unas tapas creativas. Patiens es como ese amigo que siempre trae buena energía y sabe que lo mejor en la vida llega con calma. PVP: 38 €
Bodegas Franco-Españolas- Estuche Doble Especial Bordón
Desde 1890, Bodegas Franco-Españolas es el lugar donde la elegancia francesa y la pasión riojana se dan la mano. Fundada por Frederick Anglade Saurat, esta bodega es testigo de historias que han viajado a través del tiempo y de generaciones de amantes del buen vino. ¿El resultado? Vinos con carácter, tradición y un toque de audacia que nunca pasa de moda. El estuche Bordón D’Anglade es como tener un dúo dinámico en tu mesa.
El Crianza, fresco y juguetón, con notas de fruta madura y especias, pide ser descorchado con una tabla de embutidos, pizzas gourmet o incluso unas croquetas caseras. El Reserva, en cambio, es el amigo elegante de la fiesta: aromas de frutas rojas, vainilla y un ligero tostado que combina de maravilla con carnes asadas, guisos tradicionales o quesos curados que te harán salivar. Este estuche es la excusa perfecta para reunir amigos, encender el horno y disfrutar de dos vinos que llenan las copas y llenarse alma con esos momentos que valen la pena. PVP: 40 €
Dominio de Atauta – Dominio de Atauta Magnum Estuche
Dominio de Atauta es una joya escondida en el mágico Valle de Atauta, en la Ribera del Duero. Sus viñedos centenarios, muchos de ellos prefiloxéricos y con más de 150 años, son auténticos testigos de una historia que se bebe a sorbos. Aquí, cada botella cuenta una aventura donde la tradición y el terroir son los protagonistas. El Estuche Magnum de Dominio de Atauta, presentado en una elegante caja de madera, es una verdadera joya para cualquier ocasión.
Este Tinto Fino te da la bienvenida con un desfile de aromas: frutas negras maduras que te transportan a un mercado en pleno verano, especias que susurran secretos del bosque y un toque mineral tan auténtico como el suelo calizo del valle. En boca, es como un abrazo cálido: taninos suaves, textura sedosa y un final largo que te invita a quedarte.
¿Y el maridaje? Piensa en un chuletón chisporroteando en la parrilla, un guiso de esos que se cocinan lento mientras llenan la casa de aromas, o un queso curado que pide a gritos compañía. Incluso con un surtido de embutidos ibéricos, este vino será el mejor amigo en la mesa. Perfecto para disfrutar entre risas y buenos momentos. PVP: 67 €
Bodega Miguel Domecq – Torre de Ceres Palomino 2023
En Jerez, donde la albariza brilla como el oro al sol y la brisa atlántica susurra historias antiguas, nace Torre de Ceres Palomino 2023. Este vino es mucho más que una añada; es un homenaje al terroir único y al espíritu visionario de Miguel Domecq, quien ha redefinido el arte de los vinos tranquilos en esta región.
Elaborado con uva Palomino Fino del icónico Pago de Monte Corto, este vino, del que solo existen 4.500 botellas, comienza su viaje con una vendimia nocturna –porque incluso las uvas saben que el calor no es amigo– y continúa con una fermentación espontánea antes de descansar durante 9 meses bajo la magia del velo de flor en esas botas jerezanas que tanto nos gustan, pero también en barricas de roble francés.
En nariz, es como pasear por un mercado gaditano: flores blancas frescas, almendras y avellanas tostadas, con ese toque salino que recuerda a un paseo por la bahía de Cádiz. En boca, sorprende con su frescura, acidez radiante y un toque especiado que despierta una sonrisa cómplice. Perfecto para pescados y pescaítos, sushi, mariscos, salazones o porqué no, con un buen plato de jamón ibérico, es como el compañero ideal en una cena: sofisticado como un señorito andaluz, al mismo tiempo que cercano en el alma. PVP: 22
