El Sindicat de Metges de Catalunya y la Conselleria de Sanidad de la Generalitat llegaban a un acuerdo in extremis el 31 de enero para desconvocar las jornadas de huelga programadas para el mes de febrero. El acuerdo es, en la práctica, un cambio de modelo de gestión de la sanidad a gran escala y supondrá importantes inversiones en un futuro próximo.
Algunos de los efectos que causó la pandemia sobre el sistema sanitario en Cataluña han venido para quedarse. El sistema resistió porque los sanitarios dieron el 300% de sus capacidades y porque adaptaron la gestión global del sistema a sus posibilidades reales, para subsistir en un momento de colapso. Se dejaron de hacer pruebas o visitas sin valor real, se aligeraron las consultas de los aspectos más burocráticos, los hospitales pudieron concentrarse en atender las demandas a los especialistas, y la atención primaria servía de barricada para que el sistema hospitalario no colapsara. Se potenció la atención domiciliaria a los enfermos crónicos…
Medidas que hacen más eficaz el sistema sanitario
Estas estrategias adaptativas han venido para quedarse porque aligeran el sistema y forman parte del paquete pactado entre sindicatos y gobierno. Reducir la burocratización, esa es una de las claves del futuro, pero no la única. La autonomía de gestión de los centros es otra de las demandas que ya se está aplicando y que ira en incremento.
Estas medidas hacen más eficaz el sistema, pero no son las únicas necesarias. La falta de recursos financieros en la sanidad se ha suplido con salarios bajos, larguísimas listas de espera y escasa renovación de las infraestructuras técnicas. Una mejor sanidad pasa por disponer de más personal contratado y mejor pagado. Los profesionales mejor pagados de la sanidad pública española son los del País Vasco, muy por encima de la media, y no es casualidad. Euskadi, gracias al concierto, dispone de medios de financiación más adecuados para retribuir mejor a sus sanitarios.
Mejor retribución o fuga de médicos
Porcentualmente estamos aun muy por debajo de la media europea. ¿Cómo se mejora la financiación de la sanidad? Solo hay una manera y es impopular: aumentando los impuestos. La mejor retribución de los sanitarios derivada de una mejor financiación contribuiría, además, a que no se produjeran fugas de talento hacia Europa, donde los salarios están muy por encima de la media española. Muchos jóvenes profesionales formados en Cataluña se van a Europa y para suplirlos tienen que venir sanitarios formados en otras latitudes. Las Universidades en Cataluña no llegan a aportar el número necesario de licenciados en medicina o en enfermería que la sociedad catalana requiere. Hay que replantearse el número de facultativos que se necesitan y de qué especialidad.
En un acuerdo previo del mes de diciembre de 2022, los sindicatos y la Generalitat acordaron destinar cerca de 500 millones extras en los presupuestos destinados a las mejoras salariales, que rondarán el 3,5%. Es insuficiente, pero se trata de un primer paso. Las guardias también estarán mejor pagadas que en la actualidad: Cataluña pasará a ser la comunidad en la que mejor se pagan.
Lo que se acordó el pasado 31 de octubre es más que un listado de medidas urgentes, quiere ser el preámbulo de un cambio de gestión profundo que priorice la sanidad como un servicio público esencial.
