Un día después de que España anunciara el reconocimiento del Estado de Palestina, en torno a 185 activistas y estudiantes ocuparon parte de la universidad de Humboldt, en Berlín exigiendo la ruptura de relaciones diplomáticas con Israel, el fin de las colaboraciones científicas con universidades israelíes y acabar con la represión a los universitarios y decentes propalestinos. El democristiano alcalde de Berlín dio la orden de desalojo inmediato. Resultado: 185 acusados de delitos penales por portar símbolos contrarios a la Constitución y allanamiento y querella criminal contra la rectora por «colaboración en la comisión de delitos». Alemania sigue los pasos de Estados Unidos donde ya hay más de 2.000 detenidos por manifestarse a favor de Palestina, el fin del genocidio y reclamar a Biden que retire su apoyo a Israel.
El presidente del gobierno, Pedro Sánchez ha anunciado esta semana que España reconocerá oficialmente el Estado de Palestina el próximo martes, 28 de mayo «como acto de paz, justicia y coherencia». Un día después de este histórico anuncio, en torno a 185 activistas alemanes, muchos de ellos estudiantes, ocuparon parte de la universidad Humboldt en Berlín donde corearon consignas a favor de Palestina e hicieron pintadas varias sobre el conflicto entre Palestina e Israel. Alemania es uno de los 40 y tantos países de Naciones Unidas que no reconoce el Estado palestino, frente a los 150 que sí lo han hecho.
Entre los lemas empleados los los estudiantes activistas berlineses se encontraban frases como «Palestina para los árabes», que es un eslogan empleado por el grupo terrorista Hamás además del llamamiento a la Intifada. Los activistas, denominados como Student Coalition Berlin (coalición de estudiantes de Berlín) exigían la ruptura de relaciones diplomáticas con Israel, el fin de las colaboraciones científicas con universidades israelíes y acabar con la represión a los universitarios y decentes propalestinos mientras se escuchaba música árabe a todo volumen. Hasta aquí nada diferente de lo que está sucediendo desde hace semanas en decenas de universidades de todo el mundo. Pero la reivindicación de paz no tuvo un final pacífico.
Al parecer, los manifestantes realizaron algunas pintadas ofensivas, hasta tal punto que la dirección de la universidad berlinesa ha prohibido a sus empleados sacar fotos de las mismas, según el digital alemán Die Welt. Aún así ha trascendido que se han realizado pintadas con contenido antisemita como la cabeza de un cerdo cruzada con una equis insinuando el término “Judensau”, cerdo judío. Además de otras pintadas contra Israel. La zona del edificio afectada estará cerrada las dos próximas semanas por obras. En este tiempo, la policía criminal recogerá pruebas para poder ser utilizadas contra los asaltantes en los numerosos casos penales que se han incoado.
Orden de desalojo del alcalde de Berlín y de la delegada de Ciencia
La presidenta de la universidad, que equivale al cargo de rectora, Julia von Blumenthal declaró a la prensa que toleró la ocupación durante horas, hasta que le llegó una orden de sus superiores, en concreto de Kai Wegner, alcalde de Berlín, del partido Unión Demócrata Cristiana (CDU), y de la delegada de Ciencia, instándole a ponerle fin de inmediato. Von Blumenthal ha asegurado que intentó convencer a los activistas por medio del diálogo de que abandonasen la universidad, pero que no lo logró.
Después de recibir la orden de sus superiores, les dio un ultimátum hasta las 6 de la tarde de este viernes para abandonar la universidad. Unos 135 manifestantes abandonaron los edificios de la universidad acompañados por profesores y catedráticos hacia las 18:30, mientras que unos 50 todavía se encontraban dentro del recinto universitario. A las siete de la tarde entró un grupo de policías armados hasta los dientes al edificio y procedió a su desalojo. Unos 200 manifestantes apostados delante de la universidad recibieron con algarabía a los expulsados. Algunos estudiantes se mostraron hostiles al impedir la labor de los periodistas que se acercaron al lugar de los hechos.
Pedro Sánchez: «Las protestas estudiantiles son valientes, legítimas y admirables»
Nada que ver lo sucedido en Alemania con lo que ocurre en España. En contra de lo ocurrido en Berlín, en su discurso del pasado martes, Pedro Sánchez aplaudió las protestas estudiantiles en favor del pueblo palestino y contra la guerra de Gaza: «Son valientes, legítimas y admirables», afirmó el presidente del Gobierno en el Congreso de los Diputados. En nuestro país, las acampadas pro-Palestina contra el genocidio se extienden por los campus de Valencia, Barcelona, Euskadi, Navarra, Madrid, Alicante, Sevilla, Málaga y Granada.
La medida tomada en Berlín recuerda más a lo que está ocurriendo en EEUU. Desde que a mediados del pasado mes de abril la policía intentara desalojar una acampada pro-Palestina en la Universidad de Columbia en Nueva York, el movimiento de protesta se ha extendido ya a unas 60 universidades de Estados Unidos con más de 2.000 detenidos, un movimiento que incrementa la presión sobre el presidente estadounidense, Joe Biden, para que retire su apoyo a Israel. Estados Unidos es otro de los grandes países que sigue sin reconocer el Estado de Palestina.
185 acusados de delitos penales por portar símbolos contrarios a la Constitución y allanamiento
Respecto a los hechos sucedidos en Berlín, ya han sido identificadas 25 personas a quienes se les han incoado casos penales por diferentes delitos como los de portar símbolos contrarios a la Constitución, tales como el triángulo rojo de Hamás. La policía ha identificado a los restantes 135 activistas y, lo más probable, es que sean denunciados penalmente por allanamiento de morada, entre otros, a pesar de que Julia von Blumenthal haya afirmado que la universidad no se querellará contra los estudiantes por allanamiento.
Por la negativa a presentar querella contra los asaltantes de la universidad, ya hay personas que exigen su dimisión, entre otros, el miembro de la Cámara Baja, Bundestag, Timo Sorge. El presidente de la asociación estudiantil cercana al espectro ideológico del partido democristiano CDU (el mismo que el del alcalde de Berlín) le acusa de ser colaboradora de la conculcación de la ley. La presidenta de Universidad Humboldt de Berlín está contra las cuerdas, de hecho atendió a la prensa estaba visiblemente afectada.
Ni un día ha pasado y la primera querella criminal contra ella acusándola de colaboración en la comisión de delitos ha sido presentada por el abogado Carsten Brennecke. Tal vez, debería haber recordado la rectora las palabras de Wilhelm von Humboldt que decía que «sin seguridad no hay libertad«. Ya que le corresponde a ella velar por la seguridad de todos los que se encuentran en el recinto universitario.