Crónica Libre habla con los trabajadores de los autobuses turísticos de dos pisos, Madrid City Tour, del Ayuntamiento de la capital, gobernado por el Partido Popular. Quieren denunciar condiciones de trabajo precarias y el mal estado de los vehículos en los que circulan, un riesgo para ellos y los usuarios. Son guías, promotores y conductores dentro de estos autobuses. Sin embargo, la mayoría de las veces realizan funciones más allá. Así relatan lo que sufren cada vez que tienen que montarse en un autobús para recorrer los lugares más emblemáticos de la capital.
Pablo Alcántara, Juan Cristian Ramos, e Ibra Palencia forman parte de los 52 guías de Madrid City Tour. Se dedican a informar a los clientes del servicio, canjear y vender billetes, anunciar las paradas del autobús y comprobar si los audios de los asientos funcionan o no. Además, informan sobre el tráfico e incidencias, arreglan problemas técnicos y lo que haga falta. 52 conductores hacen con ellos sus rutas. Puede parecer un trabajo casi idílico, paseando por las zonas más bonitas e interesantes de Madrid, contando a los turistas las excelencias de la capital… Pero nada más lejos de la realidad.
Servicios públicos gestionados por subcontrata
Desde la sección sindical de Co.bas Eulen/Madrid City Tour sus representantes denuncian que este servicio depende del Ayuntamiento de Madrid, pero la debacle viene de la subcontrata. Desde el consistorio dan la concesión a Madrid City Tour, quien a su vez, lo subcontrata a la empresa Eulen. Hace años, el servicio lo llevaba la EMT.
Sin embargo, los ayuntamientos del PP han privatizado el servicio, dándoselo a empresas que facturan millones y millones al año como Juliá Travel, Alsa o Eulen. Esta privatización ha supuesto peores condiciones para los trabajadores, y peores condiciones del servicio para los usuarios. Los representantes sindicales Pablo Alcántara, Juan Cristian Ramos, e Ibra Palencia explican sus fatales condiciones laborales.
CRÓNICA LIBRE: ¿Cómo son las condiciones de trabajo de la plantilla? ¿En qué condiciones están los autobuses?
Nuestras condiciones de trabajo son muy precarias. Trabajamos con polos y forros polares que tienen las letras borradas de tanto uso, incluso con agujeros. Nuestros asientos no están regulados para que al sentarnos puedan llegar a la máquina de canjear los bonos.
En muchas ocasiones nuestros micrófonos no funcionan y tenemos que utilizar el del conductor, lo que supone riesgo tanto para nosotros como para el compañero). Los cinturones de seguridad no se pueden enganchar o están en muy mal estado. La calefacción y el aire acondicionado en muchas ocasiones no funcionan y pasamos mucho frío en inverno y mucho calor en verano. Las máquinas de poner los audios y los asientos (que tenemos que comprobar uno a uno si funcionan) nos dan calambres. En resumen, el estado de los autobuses es lamentable.
Estamos en un riesgo constante dentro del autobús, teniendo que ir casi siempre de pie con el autobús en marcha para realizar nuestras tareas, pudiendo tener accidentes si hay un frenazo brusco, por poner un ejemplo.
CL: ¿Qué conflictos estáis viviendo los trabajadores de Madrid City Tour? ¿Cómo os habéis organizado para la lucha por vuestros derechos?
Tras años y años de soportar condiciones laborales y del servicio cada vez más degradadas, los guías de Madrid City Tour hemos decidido que es el momento de dar un paso al frente y organizarse. Por ello hemos creado la sección sindical de Co.bas Madrid City Tour/Eulen para exigir nuestros derechos, y denunciar estas ilegalidades y atropellos. Ahora mismo estamos organizando a los compañeros, denunciando la situación ante Inspección de Trabajo y en redes sociales y exigiendo a la empresa que se reúna con nosotros y escuche nuestras reivindicaciones.
CL: ¿Qué es lo peor en el día a día?
En Madrid City Tour los trabajadores no tenemos ni un minuto de descanso para poder comer en las ocho o nueve horas de jornada. No tenemos baños propios y tenemos que depender de establecimientos ajenos a la empresa. En muchas ocasiones no se cumple que entre un turno y otro pasen las doce horas de descanso, saliendo de trabajar a las diez de la noche y entrando el día siguiente a las nueve de la mañana. Otras veces nos cambian los turnos de un día para otro sin avisarnos, cuando por ley tienen que hacerlo con cinco días de antelación.
CL: ¿Cómo está la plantilla?
Entre los compañeros hay mucho malestar por las condiciones laborales y del servicio. La empresa no cumple con lo mínimamente justo y eso lo notamos en estrés, cansancio, ansiedad, y hasta rabia. Muchos de nosotros hemos decidido que ya era el momento de organizarse frente a estos abusos de Madrid City Tour/Eulen. La única forma de conseguir nuestros derechos es organizándonos y luchando.
CL: ¿Cuáles son vuestras reivindicaciones?
Nuestras principales reivindicaciones son: tener baños propios a los que ir, tener descansos para comer entre las ocho horas de turno, que funcionen correctamente los sistemas de aire acondicionado y de calefacción, que se cumplan los requisitos básicos en materia de riesgos laborales y seguridad de nuestro puesto de trabajo (asientos regulados, cinturones que funcionen).
Además, queremos que se respeten las doce horas de descanso entre turno y turno, que se respete los cinco días de pre aviso para cambiar un turno, que se respeten las mínimas condiciones higiénicas dentro del autobús (que se limpie el polvo), y que se nos pague por formar a nuevos compañeros, festivos, nocturnidades, las horas extras y todas las horas que estamos de retén.
Y lo más importante, exigimos que se nos incluya en un convenio que se adecue a nuestras condiciones laborales dentro del autobús. Ahora mismo estamos en el convenio de marketing operacional (de los que venden tarjetas en los centros comerciales), que nada tiene que ver con lo que hacemos. Luchamos por estar en el convenio de transportes que es el que nos corresponde.
CL: ¿Cómo ha reaccionado la empresa, Madrid City Tour/Eulen al plantearles vuestras demandas?
La empresa, de momento, ha hecho oídos sordos a nuestras reivindicaciones. Dice que no somos representación sindical de los trabajadores y que no tiene por qué reunirse con nosotros. También ha atemorizado a compañeros para que no se sindicalicen y organicen. Sin embargo, en una última reunión con uno de nuestros compañeros, se vieron obligados a reconocernos como representación de los trabajadores y a decir que iban a “estudiar nuestra tabla reivindicativa”.
CL: ¿Y cómo ha reaccionado el Ayuntamiento de Madrid?
Del Ayuntamiento de Madrid no tenemos información. En unos pocos meses, el Ayuntamiento de Madrid va a tener que sacar a concurso público la contratación del servicio de Madrid City Tour, ya que en 2021 se acabó la concesión (que ampliaron por la pandemia). Nuestro plan es dirigirnos a los grupos municipales para exigir que en los pliegos de la próxima concesión se especifique que tienen que mantener todos los puestos de trabajo, se nos mejoren nuestras condiciones laborales y se nos cambie al convenio de transportes.
CL: ¿Ayuntamiento y empresa se coordinan para responder a los trabajadores?
Estamos seguros de que el Ayuntamiento de Madrid conoce nuestra mala situación. Pero está claro que hace grandes negocios con las empresas privadas, como ya hace con otros servicios públicos que ha ido privatizando en los últimos años. Como hemos visto con la sanidad, con las residencias de mayores, al PP le da igual como estén nuestras condiciones laborales y de servicio, mientras siga dando beneficios. Si no nos organizamos y presionamos, tanto el Ayuntamiento como Madrid City Tour van a seguir ignorándonos.
CL: ¿Cuáles serán vuestros próximos movimientos en la lucha por unas condiciones de trabajo dignas?
En estas últimas semanas hemos mandado a la empresa la creación de la sección sindical Co.bas Eulen/Madrid City Tour y nuestra tabla reivindicativa, para pedir una reunión para discutir sobre nuestras condiciones de trabajo. Hemos estado organizando a los compañeros y animándoles a afiliarse. También hemos puesto una denuncia a Inspección de Trabajo y difundido por redes sociales nuestra lucha y reivindicaciones.
Ahora volveremos a escribir a la empresa una carta para pedirle de nuevo una reunión. Si vemos que en unos días no atienden nuestras quejas, haremos todo lo posible porque nuestro conflicto se conozca de forma pública y nos movilizaremos para exigir nuestros derechos.