Seis años después, España es hoy un país más justo, un país mejor. La periodista Vicky Bendito comenzó en 2018 una iniciativa para reformar el articulo 49 de la Constitución: eliminar la expresión «disminuidos físicos, sensoriales y psíquicos» y reemplazarlo por «personas con discapacidad». Esta semana, por fin, el Congreso ha aprobado la modificación. Un hito en la Historia de España y un emotivo momento cuando políticos de todos los colores se han girado a la tribuna de invitados a aplaudir a quienes han trabajado por sacar adelante este avance social. Y entre todos, claro, estaba ella, la persona que lo empezó todo, la mujer sorda que consiguió que todos la escucharan.
¡Cuántas veces habrá tenido que escuchar Vicky Bendito que en este país hay cosas mucho más necesarias, asuntos más importantes, temas más urgentes que reformar el artículo 49 de la Constitución! «Bendita ignorancia!, pensaría Vicky, haciendo honor a su acertado apellido, que encaja en ella como anillo al dedo. «Pensaba en lo poco que se sabe de la realidad que viven las personas con discapacidad, sobre todo las mujeres, de lo que implicaba la redacción de ese artículo: Una vida relegada al cuidado de terceros, no al desarrollo como ciudadanía de pleno derecho», confiesa esta periodista y defensora de los derechos de las personas con discapacidad y enfermedades raras.
Vicky Bendito nació sorda, pero no calla mientras haya alguien que le escuche. De hecho, reconoce que también es «narradora oral por vocación». Y eso se palpa cuando detalla el por qué de su titánica lucha por la dignidad y la justicia social. «El artículo 49 de la Constitución, que fue un hito en su momento porque, por primera vez teníamos un espacio en nuestra Ley de Leyes, pero habla de las personas con discapacidad como “disminuidos” que necesitamos “tratamiento” y “rehabilitación”, que el Estado deberá tomar todas las medidas para nuestra integración y para que tengamos toda la atención especializada que requiramos», explica.
Pero, así lo explica ella, tratamiento necesitan las enfermedades; y rehabilitación, las lesiones; que tienen integración, pero no inclusión; y que la atención especializada que necesitan la mayoría de las veces corre de su cuenta. Ante esa cruda realidad tenía dos opciones: o bajar el sonotone, mirar a otro lado y tragar con lo que hay; o levantar la cabeza, mirar a los ojos de las vetustas instituciones y la jurásica burocracia y luchar por avanzar.
Y no tuvo dudas, hizo lo que había que hacer «porque hemos sido las propias personas con discapacidad las que hemos superado con creces ese punto de vista, porque aún la brecha laboral y salarial con respecto a las personas sin discapacidad es muy grande, porque aún existen prejuicios hacia nosotras que tratan de impedir que tengamos vida propia, carrera propia, libertad sobre nuestras vidas».
Y así en 2018, con el lema ‘Soy sorda, no disminuida‘, comenzó Vicky Bendito una quijotesca campaña de recogida de firmas en la plataforma Change.org contra los gigantescos molinos de la intocable Constitución y sus fervientes defensores para cambiar la expresión «disminuidos físicos, sensoriales y psíquicos» por personas con discapacidad del hoy famoso artículo 49.
Y seis años después lo consiguió. Esta periodista por vocación que conoce los intríngulis de la Justicia y la política de este país como pocas, tras años escribiendo de Tribunales y del Congreso de los Diputados, consciente de la dificultad de la batalla que había iniciado, recibía el gran aplauso que merecía. Todo el Senado al completo, presidente del Gobierno, ministros, oposición… políticos de todos los colores mirando a la tribuna de invitados reconociéndoles a quienes han trabajado por este avance social que este hito es suyo. Y a la persona que lo empezó todo. a esa mujer sorda, pero no disminuida que ha conseguido que éste sea un país más justo, un país mejor. «Era una cuestión de dignidad», reconoce Vicky Bendito a Crónica Libre.
¿Qué implica esta histórica reforma?
La reforma de la Constitución no se limita sólo a un cambio de término, a sustituir una palabra por otra: en este caso, disminuidos por personas con discapacidad. Es una reforma que va más allá, era necesaria si España quería ser coherente con la Convención de los Derechos de las Personas con Discapacidad que no sólo firmó sino que ratificó. No tenía sentido que después de eso mantuviera en sus leyes el artículo 49. Había que terminar con esa visión médico rehabilitadora de la discapacidad.
¿Y en qué radica su importancia?
Una de las cosas fundamentales del nuevo artículo 49 radica en que recoge expresamente el concepto de la accesibilidad. Es decir, la accesibilidad pasa a ser un derecho constitucional para las personas con discapacidad. Esto es algo clave porque la accesibilidad es fundamental y así lo considera la ONU para nuestro colectivo porque sin accesibilidad no hay inclusión y sin inclusión no podemos ser ciudadanos de pleno derecho, no podemos ser partícipes de la sociedad.
La accesibilidad no va a hacer que la discapacidad desaparezca, pero sí va a permitir que las personas con discapacidad salgamos, que se nos vea, que interactuemos con nuestro entorno y eso es muy importante. Accesibilidad en todo, en la educación básica, desde la guardería hasta la ancianidad, en cada una de las etapas de nuestras vidas. La accesibilidad además no sólo es un derecho para las personas con discapacidad, es que además facilita mucho la vida a la sociedad en general, es algo que beneficia a todas y a todos.
El activismo feminista de Vicky Bendito también se ve plasmado en este nuevo artículo 49…
El artículo menciona expresamente a la mujer y a los menores con discapacidad. Son muchas las razones por las que se deben mencionar a las mujeres con discapacidad, como las diferencias salariales y la brecha laboral. Pienso especialmente en las mujeres con discapacidad sobrevenida por violencia de género y en las mujeres con discapacidad en el ámbito rural, donde el único fin que les esperan en muchísimos casos es el de servir a los demás porque para eso resulta que sí valemos.
¿Es consciente de que estamos ante un hito?
Una vez que se publique en el BOE y forme ya parte de nuestra Constitución será un hito en la historia. Yo creo que en la historia de España y del mundo porque por fin las personas con discapacidad tenemos el lugar que nos corresponde en la Carta Magna. y porque era una cuestión de dignidad. Y punto.
